El 52% de los españoles opina que la escuela actual es peor que la de antes y el 55% cree que el alumnado sale peor preparado. Además, casi tres de cada cuatro ciudadanos piensan que ahora no hay disciplina ni respeto por los docentes. Esta visión sobre la educación se refleja en la ‘I Encuesta de Percepción Social de la Innovación Educativa’, un estudio presentado por la Fundación Cotec y realizado en colaboración con la agencia 40dB, que se basa en más de 7.000 entrevistas.
Este documento muestra que más de la mitad de la población (56%) considera que la escuela no responde a las necesidades actuales de la sociedad. El principal motivo, según los encuestados, es la falta de formación adecuada en habilidades sociales. No obstante, también critican que a los estudiantes no se les enseñe lo fundamental y que no se les forme de manera apropiada para ejercer una ciudadanía responsable. Como posibles soluciones, abogan primordialmente por aplicar innovación al sistema educativo para realizar una transformación urgente, aumentar los presupuestos y actualizar las metodologías de enseñanza.
A juicio de un porcentaje significativo de las personas consultadas, el origen socioeconómico del alumnado condiciona el acceso a la educación. De hecho, el 40% cree que algunos colectivos vulnerables ni siquiera acceden a la enseñanza obligatoria y tres de cada diez piensan que, cuando sí lo hacen, no tienen garantizado un aprendizaje de calidad. Sorprende también que el 58 por ciento de los entrevistados apuesten por reducir el fracaso escolar y el abandono educativo temprano como primera medida para mejorar el sistema educativo, mientras que sólo el 14% refieran la necesidad de rebajar los niveles de repetición de curso.
Según este estudio demoscópico, a la hora de escoger colegio para sus hijos, de una lista de dieciséis factores, los españoles eligen como los más determinantes la calidad del profesorado, la atención a las necesidades de aprendizaje y el proyecto educativo del centro. Los que menos les importa son el perfil del resto de las familias, el ideario de la escuela (laico o religioso) y la oferta de actividades extraescolares. Más del 90% opina, asimismo, que tener buenos docentes y el esfuerzo personal son los elementos cruciales para el éxito académico.
La gran mayoría de los encuestados estiman que el desarrollo tecnológico y su entrada en la escuela es sinónimo de innovación (77%) y de mejora en la calidad educativa (70%). Sin embargo, la población también percibe ciertos riesgos en este campo y el 66% destaca que los modelos educativos digitales excluyen a parte del alumnado, principalmente porque en algunos hogares no hay suficientes dispositivos electrónicos. Casi la mitad de los participantes en el estudio sostiene que la innovación educativa, en general, aumenta las desigualdades, y el 88% afirma que solo funciona cuando la comparte toda la comunidad educativa (profesores, familias y alumnos).