La ministra de Educación y Formación Profesional ha recordado que, según el informe PISA de 2018, España es el tercer país de la Unión Europea con el mejor clima escolar. “La media en Europa de acoso a los 15 años está en un 23% y en España, en un 17%, pero en estos temas no hay porcentaje válido”, ha sentenciado Pilar Alegría. En este sentido, ha recalcado que “todo lo que vaya en la dirección de mejorar la convivencia” y evitar bullying “es positivo”.
Durante una visita al IES Miguel Catalán en Coslada para participar en los actos del Día Internacional contra la Violencia y el Acoso Escolar, la titular del MEFP ha destacado el compromiso del Gobierno para que los centros educativos sean espacios seguros y de libertad para niños, niñas y jóvenes. En este instituto madrileño, que promueve el diálogo y la escucha para prevenir el acoso y facilitar la resolución de conflictos, la ministra ha participado con docentes y estudiantes en un círculo de diálogo, instrumento que emplean para abordar los temas relativos a la convivencia, reforzar los vínculos interpersonales y fomentar el trabajo conjunto, generando espacios de seguridad.
El acoso en las escuelas es un problema que está siendo abordado por el Ministerio de Educación y Formación Profesional, junto con las administraciones educativas. En este sentido, Alegría ha señalado que la Ley de Educación actual (LOMLOE) “recoge de manera transversal las competencias sociales y la educación emocional en todas las etapas”. “Además -ha añadido-, hemos recuperado la materia de Valores Cívicos para la resolución pacífica de conflictos y se pone en marcha la nueva figura del Coordinador de Bienestar en todos los centros, gracias también a la Ley de la Infancia”. Asimismo, se ha referido al programa “pionero” para abordar la salud mental de los estudiantes, para el cual las comunidades autónomas recibirán cinco millones de euros, y a la reactivación del Observatorio Estatal para la Convivencia Escolar.
Por otra parte, la ministra ha pedido a los alumnos y alumnas, a través de un vídeo difundido en sus redes sociales con motivo del Día Internacional contra la Violencia y el Acoso Escolar, que actúen y no permanezcan “impasibles ni en silencio” ante el bullying, una lacra que se puede atajar con la implicación de toda la sociedad en su conjunto, de los estudiantes, de los docentes y de las familias. “Necesitamos, como país, que crezcáis libres y sin miedo”, ha declarado Pilar Alegría, quien ha subrayado que los centros educativos tienen que ser “espacios seguros” donde poder expresarse, “aprender y ser felices”.
Los profesores también sufre el acoso
Por su parte, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha recordado que casi el 20% de la población en edad escolar padece bullying y “la mayoría lo sufre en silencio por miedo a represalias y vergüenza que puede devenir en situaciones trágicas”. Además, ha querido llamar la atención sobre el hecho de que el profesorado, “sumido en una absurda burocracia y con unas ratios elevadas”, es también “víctima de acoso en la red y en grupos de padres y madres”.
Este sindicato alerta de que “el ciberbullying representa ya uno de cada cuatro casos de acoso escolar”, proporción que aumenta con la edad, tal y como se desprende de un estudio realizado por la Fundación ANAR y la Fundación Mutua Madrileña. Es por ello que se trata de un tema de “importancia capital” y que “necesitaría programas realistas” que “partan de la verdadera realidad del aula, de la situación de los centros educativos y de la opinión profesional del profesorado”. Según CSIF, en lugar de adoptar este tipo de medidas, las administraciones educativas “venden medidas a la sociedad que solo tienen un efecto placebo pero que cargan al profesorado con más tareas burocráticas y sin contraprestaciones horarias o económicas”.
A juicio de la central sindical, la solución a este problema pasa por ayudar el profesorado, lo que exige dignificar la labor docente, mejorar las condiciones socio-laborales de los profesionales de la enseñanza, reconocer su autoridad, dotarles de los medios necesarios y respaldarles desde la inspección educativa.